Acabo de ver en fecebook una
imagen que pregunta “¿se les debería enseñar a los niños a cultivar comida en
la escuela?
Me gustaría pensar que cada
persona que lee esta pregunta responde que sí, realmente espero que este sea el
caso.
Adquirir la capacidad de cultivar
comida es algo bueno en sí mismo, pero son los aprendizajes indirectos los más trascendentes, aún si de
adultos no se cultivara ni una sola zanahoria.
Por un lado, sólo basta ver cómo
cada vez es más difícil conseguir alimentos orgánicos. Cada uno de nosotros
deberíamos saber y poder cultivar vegetales y frutas.
Aparte de la utilidad directa de
poder cultivar comida, podrán ver cómo las actitudes y acciones que uno tiene
sobre las cosas tienen consecuencias; cómo el trabajo trae fruto. Y lo
aprenderán vivido, no contado, así les quedará de por vida, en sus mentes y
corazones; e influirá sus acciones en otras áreas de sus vidas, en todas las
etapas de su vida.
A través de esta enseñanza,
aprenderían el valor de cuidar las cosas más pequeñas que ellos. Esto
indirectamente podría llegar a reducir el bullyng. Verían y experimentarían
cómo si plantan algo, lo riegan constantemente, y lo cuidan de los posibles
peligros (insectos, clima, etc.), ellos recibirán algo a cambio, un fruto que
pueden comer, y como necesitamos comer para vivir, aprenderían que si ellos (los
niños) hacen algo bien, recibirán bien.
Incluso si no se logra que
germinen las semillas. Aprenderían a lidiar con el fracaso (que tendrán innumerables
veces a lo largo de su vida) y si tras el fracaso vuelven a intentarlo hasta
lograr obtener el fruto, aprenderían el valor de la perseverancia.
Creo que podríamos encontrar
muchísimas buenas razones más para enseñar cómo cultivar frutas y vegetales.
Para mí ya con las mencionadas es suficiente para querer que las escuelas
incluyan esta actividad entre sus actividades.